¿Quién era el Dios de Spinoza?
Baruch de Spinoza era un
filosofo holandés que es fue considerado como uno de los grandes racionalistas
de la filosofía en el siglo XVII junto con descartes y pascal entre otros.
Sus reflexiones supusieron una
gran critica a la visión clásica y ortodoxa de la religión algo que derivó en
su excomunión y destierro, así como la prohibición y censura de sus escritos
por parte de su comunidad.
Su visión sobre el mundo y de
la fe se aproximan en gran medida al panteísmo, es decir que la idea de que lo
sagrado es toda la naturaleza en sí misma. Esto básicamente quiere decir que
Todo es Dios.
Aunque el holandés fue
repudiado por su forma de pensar, sus obras perduraron. Y no solo eso, sino que
fueron abrazadas por mentalidades tan ilustres como la Albert Einstein. La
postura y creencias religiosas del físico se aproximaban a la visión del Dios
de Spinoza.
Cuando Einstein fue
entrevistado por el rabino Herbert S. Goldstein sobre que si creía en dios y el
respondió "Creo en el Dios de Spinoza, quien se revela así mismo en una
armonía de lo existente, no en un Dios que se interesa por el destino y las
acciones de los seres humanos".
En 1930, durante una
entrevista publicada en el libro Glimpses of the Great de G. S. Viereck, el
Premio Nobel se explayó aún más sobre este tema: "Tu pregunta es la más difícil del
mundo. No es algo que pueda responder con un simple sí o no. No soy ateo. No sé
si puedo definirme como un panteísta. El problema en cuestión es demasiado
vasto para nuestras mentes limitadas. ¿Puedo contestar con una parábola? La
mente humana, no importa que tan entrenada esté, no puede abarcar el universo.
Estamos en la posición del niño pequeño que entra a una inmensa biblioteca con
cientos de libros de diferentes lenguas. El niño sabe que alguien debe de haber
escrito esos libros. No sabe cómo o quién. No entiende los idiomas en los que
esos libros fueron escritos. El niño percibe un plan definido en el arreglo de
los libros, un orden misterioso, el cual no comprende, solo sospecha. Esa, me
parece, es la actitud de la mente humana, incluso la más grande y culta, en
torno a Dios. Vemos un universo maravillosamente arreglado que obedece ciertas
leyes, pero apenas entendemos esas leyes".
"Nuestras mentes
limitadas no pueden aprender la fuerza misteriosa que mueve a las
constelaciones. Me fascina el panteísmo de Spinoza porque él es el primer
filósofo que trata al alma y al cuerpo como si fueran uno mismo, no dos cosas
separadas".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario